En Chile, un grupo de ONGs celebró con una actividad ciudadana: una caminata hasta la plaza de armas, animada por el grupo carnavalero "Chinchintirapié" y un muro andante al que se invitaba a escribir a las personas que a esa hora caminaban por el centro de Santiago. La actividad completa fue un regalo a la ciudad y a las personas que a esa hora se encontraron con la marcha, el baile y la música; la gente se detenía a leer, miraba con curiosidad y muchos se animaron a disfrutar y a escribir.
Si bien me queda la sensación que es una gota en medio de la extensión de Km. de individualismo en esta ciudad, se trata de una gota virtuosa que sin duda hace crecer algo distinto.